El Ministerio de Cultura y las cifras de Ibermedia

El pasado 24 de junio, el Ministerio de Cultura dio a conocer a la comunidad cinematográfica el resultado básico de la primera convocatoria 2011 del Programa Ibermedia, sin las cifras precisas de las ayudas conseguidas, ni mayores detalles de los diversos temas discutidos en la reunión de las autoridades cinematográficas iberoamericanas realizada en México, en la que representó al Perú el ex directivo del disuelto Conacine y miembro de la actual Comisión Consultiva Nacional de Cinematografía, el director Ricardo Velásquez.

La parte final del comunicado decía lo siguiente: “Mayor información con relación a los detalles de las negociaciones y priorizaciones convenidas en la presente convocatoria, las haremos públicas inmediatamente después de recibir el informe correspondiente de nuestro representante ante IBERMEDIA”. Dieciocho días después, no se ha agregado una línea a los datos emitidos, que se limitan a las ayudas obtenidas por los proyectos En busca de Javier, de Eduardo Guillot, y El mudo, de Daniel y Diego Vega, en la categoría de desarrollo, y Climas, de Enrica Pérez, en la categoría de coproducción (Continúa).

Esta suerte de autocongelamiento informativo, muestra una vez más el desinterés de la Dirección General de Industrias Culturales y Artes, a cargo del Econ. Daniel Alfaro Paredes, y de la Dirección de Industrias Culturales, a cargo de la Dra. Isabel Matías Elías, por mantener a los cineastas al tanto de asuntos claves, lo que contradice el ofrecimiento de mayor desarrollo y transparencia hecho en medio de la crisis institucional del cine peruano provocada por la disolución del Consejo Nacional de Cinematografía (Conacine). Como señalamos en un anterior comunicado, y respecto al mismo tema, fue a última hora, y cuando ya estaba todo decidido, que se informó a la comunidad cinematográfica sobre la identidad del representante nacional, las comisiones calificadoras y los nombres de los proyectos concursantes presentados a Ibermedia.

Esta actitud se debe quizás a que, como se conoce extraoficialmente, en esta primera convocatoria del 2011 se habría logrado menos de 100 mil dólares, y el Perú sería uno de los países menos favorecidos, lo que significaría una merma de los recursos que han permitido financiar en los últimos años mayor cantidad de películas peruanas, a veces fortalecidos con aportes de socios minoritarios en el marco de la coproducción (Venezuela, México). Efectivamente, hay que recordar que en el año 2007 se obtuvo 258 mil dólares; en 2008, 476 mil; en 2009, 443 mil; y en 2010, 300 mil. Quiere decir que, para evitar un significativo descenso del promedio, en la segunda convocatoria del 2011 se tendría que triplicar el monto, lo que resulta sumamente difícil, y de no darse acentuaría la disminución ya apreciada en la cifra del 2010. Recordemos que nuestro aporte a Ibermedia es de 150 mil dólares.

En ese sentido, es demostrativo y preocupante que la nebulosa institucional por la que atraviesa el cine peruano desde el mes de febrero, ya esté provocando también la pérdida de oportunidades de financiamiento, que es justamente lo que el discurso oficial siempre ha colocado en primer y a menudo exclusivo lugar, pero que en esta ocasión parece no haber merecido mayor preocupación, ni antes ni después de la reunión de Ibermedia en México.

Por ello, demandamos a la Dirección General de Industrias Culturales y Artes del Ministerio de Cultura que, en la brevedad posible, dé cuenta de las sumas exactas de las ayudas obtenidas en Ibermedia 2011 – I, que publique el acta firmada por las autoridades cinematográficas iberoamericanas, y que indique cómo piensa que la próxima administración deberá revertir esta magra recaudación.

Unión de Cineastas Peruanos (UCP)
Martes 12 de julio de 2011